Un día un tupper y una bolsa se encontraron e hicieron más
que migas. En su transcurrir pasaron aventuras y desventuras propias de su
condición.
Lo que sucedió después lo sabe la persona que recibió este
regalo.
Los Artesanos de historias se acercan a las vivencias de uno,
pero sobre todo a lo que ronda en el corazón. Tienen experiencia en cuanto a
navegar por las tripas del otro, han escalado los sentimientos más puntiagudos;
no temen a la muerte y mucho menos a sentir.
Lo único que necesitan es que les cuentes tu historia para
que la traduzcan en fantasías.